Torna la Formación del Espíritu del Hogar

 

 

El passat mes de maig, el cardenal i arquebisbe de València, Antonio Cañizares, aquell que apareix sovint vestit de drag queen, va demanar des de la trona que els catòlics desobeeixin aquelles lleis que ell considera injustes i que són les basades en “la ideologia més insidiosa i destructora de la humanitat de tota la història, que és la ideologia de gènere” (sic). La setmana passada, agost 2016, mossèn Vladimir, rector de la Bisbal del Penedès, durant el sermó de la festa major, va fer una crida perquè les dones es quedin a casa: “a les dones us pertoca estar a casa i ser submises als homes, com Maria” (sic).

Tot un viatge al túnel del temps. He posat el (sic) després de cada sentència per remarcar la literalitat de les frases. No són cap invent, però em porten, malauradament, a una regressió. I per això, simplement, he volgut recollir fragments d’altres discursos paral·lels, amb el mateix fons i objectiu. Passen els anys, els segles, però hi ha actituds que romanen.

Un recull breu. Comencem per Pilar Primo de Rivera, al capdavant de la Sección Femenina tota la seva vida. La Sección Femenina es va convertir, a partir de l’any 1939, en l’organització franquista encarregada de la formació de les dones espanyoles. La institució l’encapçalava Pilar Primo de Rivera, germana del dirigent de la Falange, José Antonio Primo de Rivera, i seria fonamental per al manteniment del règim franquista. Moltes dones van formar part d’una manera o d’una altra de la Sección Femenina, una organització que tenia privilegiats instruments de control sobre la població civil mitjançant l’adoctrinament, la formació i el Servei Social. La vigència d’aquests elements van permetre, al llarg de gairebé tres generacions de dones, la perpetuació dels esquemes franquistes.  La Sección Femenina es va caracteritzar pel seu antifeminisme, d’aquesta manera evitava de topar amb l’ordre instaurat patriarcal de Pare, Patró i Déu.  Tingueu en compte, a més, que la Sección Femenina va ser la representant espanyola a les conferències mundials de l’ONU sobre les dones fins al 1976.

“Las mujeres nunca descubren nada, les falta, desde luego el talento creador, reservado por Dios para inteligencias varoniles; nosotras no podemos hacer nada más que intentar mejor o peor lo que los hombres han hecho.” (Pilar Primo de Rivera, discurs 1942)

“Tenemos que tener detrás de nosotras toda la fuerza y la decisión del hombre para sentirnos más seguras, y a cambio de esto nosotras les ofrecemos la abnegación de nuestros servicios… Que ése es el papel de la mujer en la vida (…), dejarse guiar por la voluntad más fuerte y la sabiduría del hombre”. (Pilar Primo de Rivera, 1943)

“No es bueno que el hombre esté solo, y formó a la mujer, para su ayuda y compañía, y para que sirviera de madre. La primera idea de Dios fue “el hombre”. Pensó en la mujer después, como un complemento necesario, esto es como algo útil.” (Pilar Primo de Rivera, 1944)

Seguim amb altres píndoles de reputats metges, capellans, mestres i escriptors:

“La independencia más agradable para una mujer normal consiste en casarse y tener hijos, es decir, en ser dependiente, sino hasta la esclavitud, al menos hasta una forma pasable de servidumbre, de las ocupaciones propias del sexo. (…) Lo que sí me interesa hacer constar es que lo menos importante en una mujer, cuando se ha hablado de todo, es lo que los pedantes llaman la inteligencia. En definitiva, creo que la mujer más inteligente es la que contiene en sí menos ingredientes de lo que suele a dar a entender cuando se dice: La señorita es muy inteligente, es bachillera, farmacéutica, bibliotecaria o inventora de la bomba atómica. Si, por un azar extravagante, yo tuviera que escoger entre pasar el rato con la inventora de la bomba atómica, lega en asuntos de cocina, y una cocinera fresca, limpia y analfabeta como un asno, no dudaría ni un solo momento. Pero ya comprendo que mi vulgaridad es inmensa” (Josep Pla, Destino, 1945)

“Los primeros juguetes de las niñas han de ser las muñecas o cosas parecidas, en conformidad con sus fines ulteriores. Por donde se lleve el agua, por allí corre; y el agua es la conciencia de las niñas en sus primeros años; que corra por sus cauces propios y femeninos.” (Antonio García Figar, dominic, Por una mujer mejor, 1952.)

“El organismo de las mujeres está puesto al servicio de una matriz, el organismo del hombre se dispone para el servicio de un cerebro. (Federico Arvesu, metge i jesuïta, La virilidad y sus fundamentos sexuales, 1962)

“Los médicos de familia sabemos por experiencia que, al llegar al final de los cursos académicos, somos requeridos con frecuencia para asistir a jóvenes adolescentes que han perdido el apetito, les aquejan insomnios, padecen frecuentes jaquecas, se sienten decaídas, sufren desarreglos menstruales y presentan síntomas de la cloroanemia: son estudiantes de bachillerato superior, que han de hacer esfuerzos superiores a su capacidad física e intelectual para seguir con provecho los estudios y llegan a finales de curso agotadas. (…) Si terminado el bachillerato, la muchacha se decide o la obligan sus padres a seguir una carrera superior, es muy posible que aquellos trastornos aumenten y la salud física de la joven quede comprometida durante mucho tiempo.” (Federico Corominas, President de la Real Academia de Medicina de Barcelona, 1958)

“Un hogar normal es aquel en que el marido es el cabeza de familia, sostén de su mujer, y la autoridad ante ella y los hijos. Algunas veces, como parece que es tu caso, queda en evidencia la superioridad de la mujer sobre el marido. Mayor nivel cultural de ella o superior inteligencia, capacidad de iniciativa, fuerza de voluntad… Pero esa anomalía en ningún caso deroga la regla, y tú le sigues debiendo el mismo respeto y sumisión que el que prometiste el día de la boda. (…) Estando interesados el buen orden y la felicidad de la familia, creo que deberías reflexionar sobre tu comportamiento; Pilar nos ha recordado en diversas ocasiones que el papel de la mujer en la vida es siempre de sumisión al hombre. Pues obra en consecuencia: habla más bien poco y guárdate tus opiniones, disimula tus cualidades… Hazle ver, en fin, que continúa siendo la cabeza de ese hogar.” (Consultori Elena Francis, 1947-1966)

I aquests paràgrafs d’un llibre de text obligatori en els estudis de les dones que cursaven el batxillerat i el magisteri:

“Ten preparada una comida deliciosa para cuando él regrese del trabajo; especialmente, su plato favorito. Ofrécete a quitarle los zapatos. Habla en tono bajo, relajado y placentero. Prepárate, retoca tu maquillaje, coloca una cinta en tu cabello; hazte un poco más interesante para él. Su duro día de trabajo quizá necesite de un poco de ánimo, y uno de tus deberes es proporcionárselo.

Durante los días más fríos deberías preparar y encender un fuego en la chimenea para que él se relaje frente a ella; después de todo, preocuparse por su comodidad te proporcionará una satisfacción personal inmensa. Minimiza cualquier ruido. En el momento de su llegada, elimina zumbidos de lavadora o aspirador.

Salúdale con una cálida sonrisa y demuéstrale tu deseo por complacerle. Escúchale, déjale hablar primero; recuerda que sus temas de conversación son más importantes que los tuyos. Nunca te quejes si llega tarde, o si sale a cenar o a otros lugares de diversión sin ti. Intenta, en cambio, comprender su mundo de tensión y sus necesidades reales. Haz que se sienta a gusto, que repose en un sillón cómodo, o que se acueste en la recámara. Ten preparada una bebida fría o caliente para él. No le pidas explicaciones acerca de sus acciones o cuestiones su juicio o integridad. Recuerda que es el amo de la casa.

Anima a tu marido a poner en práctica sus aficiones e intereses y sírvele de apoyo sin ser excesivamente insistente. Si tú tienes alguna afición, intenta no aburrirle hablándole de ésta, ya que los intereses de las mujeres son triviales comparados con los de los hombres.

Al final de la tarde, limpia la casa para que esté limpia de nuevo por la mañana. Prevé las necesidades que tendrá a la hora del desayuno. El desayuno es vital para tu marido si debe enfrentarse al mundo exterior con talante positivo.

Una vez que ambos os hayáis retirado a la habitación, prepárate para la cama lo antes posible, teniendo en cuenta que, aunque la higiene femenina es de máxima importancia, tu marido no quiere esperar para ir al baño. Recuerda que debes tener un aspecto inmejorable a la hora de ir a la cama… si debes aplicarte crema facial o rulos para el cabello, espera hasta que él esté dormido, ya que eso podría resultar chocante para un hombre a última hora de la noche.

En cuanto respecto a la posibilidad de relaciones íntimas con tu marido, es importante recordar tus obligaciones matrimoniales: si él siente la necesidad de dormir, que sea así no le presiones o estimules la intimidad. Si tu marido sugiere la unión, entonces accede humildemente, teniendo siempre en cuenta que su satisfacción es más importante que la de una mujer. Cuando alcance el momento culminante, un pequeño gemido por tu parte es suficiente para indicar cualquier hayas goce que podido experimentar. Si tu marido te pidiera prácticas sexuales inusuales, sé obediente y no te quejes. Es probable que tu marido caiga entonces en un sueño profundo, así que acomódate la ropa, refréscate y aplícate crema facial para la noche y tus productos para el cabello.

Puedes entonces ajustar el despertador para levantarte un poco antes que él por la mañana. Esto te permitirá tener lista una taza de té para cuando despierte…” (Economía doméstica para bachillerato y magisterio, Sección Femenina de la Falange Española y de las JONS, llibre de text, 1958),

I, per acabar, dues perles sobre les dones i el seu “dèbit conjugal”:

“Es un imperdonable error la negación al esposo del débito conyugal. La mujer no debe, bajo ningún pretexto, negar a su marido lo que le pertenece. Muchas mujeres que se lamentan de las infidelidades de sus esposos no quieren darse cuenta de que fueron ellas las culpables de la traición por no haber conocido a tiempo la enorme trascendencia del consejo que antecede.” (Dr. Clavero Núñez, Antes de que te cases, 1946)

“La actitud íntima de la especie humana es la posición horizontal, es decir, aquélla en que el hombre se sitúa delicadamente sobre la mujer (…). La posición vertical, o sea, de pie, no puede ser más peligrosa, pues expone al hombre a graves accidentes, por ejemplo, a la parálisis de las piernas. Y cuando la mujer ocupa el sitio de su marido el acto conyugal no se cumple como debiera.” (Manuel Iglesias, Problemas Conyugales, 1954)

 

Enfilem el darrer quadrimestre del 2016 amb declaracions i afirmacions semblants. Regressió en la colonització nacional i la colonització de les dones. Un viatge al túnel del temps, però dels temps dels horrors. Aviat l’enèsima reforma en ensenyament del Gobierno de España –marxem ja!- inclourà, de nou, la Formación del Espíritu Nacional i, per a les dones, la Formación del Espíritu del Hogar.

Si eres español, habla en español

 

I sant tornem-hi amb la immersió lingüística. Avui mateix, el PP i C’s han fet públic un pacte que ha d’acabar per llei amb el que no han aconseguit ni a les urnes ni amb tot un seguit de campanyes, ben orquestrades i judicialment ben afinades. El neofranquisme i el neofalangisme tornen a l’atac, si és que mai no l’havien abandonat.

La dictadura franquista va voler expulsar el català de l’àmbit públic, en tots els camps i en totes les condicions. Josep Benet va recollir nombrosos documents amb decrets, lleis i sancions que prohibien la llengua catalana a les administracions, al carrer, a la nomenclatura, a l’escola i a tot arreu. Hi ha estudis ben documentats i rigorosos que s’hi han referit, amb dates i dades. Totes les expressions culturals que bastiren l’estructura d’una cultura del segle XX van ser anorreades: premsa, edició, biblioteques, ensenyament en tots els graus, acadèmies, universitat, teatre, cinema i ràdio. La Llei d’ensenyament primari establí l’obligatorietat de “la lengua nacional española” a les aules i també va prohibir llibres, quaderns, mapes i impresos en català. Per aconseguir aquest objectiu es va fer venir entre 700 i 1.000 mestres de fora de Catalunya per treballar als centres educatius del Principat en substitució del professorat depurat o exiliat.

El feixisme vencedor va ofegar, prohibir, menysprear i fins i tot va fer escarni de la llengua catalana.  Consignes reiterades arreu que deixaven ben clar que “Si eres español, habla español”, “Si eres español habla el idioma del imperio”, “Hable usted en cristiano”, “Prohibido escupir y hablar en catalán”, “A ver cuando deja de ladrar”…  Els exemples de lleis i documents serien nombrosos  i la dictadura es va esplaiar en les prohibicions i imposicions fins a límits que ara podríem titllar de ridículs (traduir a l’espanyol els noms a les esqueles, per exemple) i que, aleshores, eren de terror (multes i sancions, empresonament, crema pública de llibres…). Tot i això, a pesar de la repressió que algunes persones van pagar ben cara, diverses generacions, com va escriure Salvador Espriu, van viure per “salvar-nos els mots”.

Amb la democràcia i amb aquella transició mal resolta, malgrat les noves lleis i minses competències, aquest esperit de liquidar com sigui la nostra llengua no va cessar. I a Tarragona ho sabem molt bé, ho hem viscut a primera línia del front. Ja des del 1981, amb el “Manifiesto por la igualdad de derechos lingüísticos en Catalunya” –el manifest dels 2300- que s’oposava a la immersió. A la mateixa Universitat Rovira i Virgili, hi va haver alguns professors i professores que van deixar totalment de banda la ciència per aplicar-se només en la ideologia i, el 2001, van portar a judici el rector Lluís Arola acusat d’un delicte de prevaricació en apartar una professora de les proves de selectivitat perquè no va aplicar la normativa del català en lliurar exclusivament exàmens en castellà a alguns alumnes i van suspendre cautelarment el reglament d’usos lingüístics. El rector, que havia seguit rigorosament la normativa aprovada pel Parlament de Catalunya i que va rebre el suport del claustre universitari i de tots els partits polítics, excepte el PP, fou absolt. El 2010, el Tribunal Suprem va fallar en contra de les lleis del Parlament i a favor de tres famílies que –assessorades per Convivència Cívica Catalana- havien presentat recursos sobre el model d’immersió en tres escoles concertades de Barcelona, Sabadell i Tarragona. Convivència Cívica Catalana –el nom és sarcasme pur- també va aconseguir la suspensió cautelar dels reglaments lingüístics de diversos ajuntaments, com els de Lleida, Barcelona o Girona. I tants i tants d’altres casos ben coneguts i ben actuals fins arribar al pacte d’avui d’eliminar per llei la immersió lingüística.

La “regeneració democràtica” és, doncs, l’imperi de l’”España Una” i les polítiques de colonització. Quin cinisme. Però no defallirem. I menys ara que tenim a tocar, si volem, la nostra República Catalana. Van viure per salvar-nos els mots i retornar-nos el nom de cada cosa. Per això, com diu el final del poema de Salvador Espriu, ens mantindrem fidels per sempre més al servei d’aquest poble.

Les primeres dramaturgues catalanes (XVII-XVIII)

 

Durant força segles, les dones foren considerades i tractades com a inferiors físicament, moralment i intel·lectualment i així ho marcaven tant les lleis i els discursos, com l’ordre i els valors socials. En el món de la cultura i de la història literària són ben poques les dones que hi van tenir un nom propi, l’excepció que confirmava la regla. El seu accés al món professional i públic fou un camí d’entrebancs i prohibicions i, a més, moltes d’aquestes dones que hi van accedir han estat obviades i silenciades en les històries oficials. L’escriptura literària femenina medieval pràcticament es limitava a les obres sorgides en els ambients cortesans i en els convents, i, també, altres textos de dones de les classes benestants, habitualment de caire memorialístic o epistolar. Aquest seria el cas, per exemple, en la nostra literatura, de les trobadoritz, de sor Isabel de Villena o d’Estefania de Requesens.  Aquesta mateixa tònica es manté en els segles XVI, XVII i XVIII,  en què les dones que sobresurten en àmbits públics com el de la literatura continuen sent, sobretot, religioses o de famílies benestants.

Més difícil per a les dones fou encara la seva entrada en el món del teatre professional, un espectacle públic, on no ni tant sols s’acceptà la seva presència com a actrius fins a les acaballes del segle XVI, una època, val recordar-ho, en què la literatura catalana, en l’Espanya dels Àustries, vivia hores baixes, gravada per una forta castellanització que va condicionar també la vida escènica. Tot i algun precedent –la companyia italiana Ganassa el 1574-, es considera que oficialment les dones es van incorporar als escenaris el juliol de 1587, quan la companyia italiana Els Confidents van demanar llicència al govern espanyol per poder representar a Madrid les seves obres amb actrius, cosa que se’ls va concedir, sempre i quan fossin casades i anessin acompanyades dels seus marits. Aquesta primera llicència va obrir les portes a d’altres companyies de l’estat, que tenien en nòmina alguna actriu. Tot i això, però, a partir del mateix 1587 no van cessar els intents per tornar a prohibir la presència de les dones dalt de l’escenari.  No era una cosa inusual, perquè, si bé a França i a Itàlia les dones podien actuar, al Regne Unit, molt posteriorment, el 1629, encara causava indignació l’aparició d’actrius franceses en els seus escenaris i les britàniques no ho van poder fer fins al 1656.

Pel que fa al nostre teatre, des del 1550 hi ha documentació amb referències a actrius a les festivitats de Corpus, que cantaven i ballaven. Durant el segle XVI, moltes companyies a tot l’estat tenien en nòmina també alguna actriu, però, per norma, eren els homes que feien els papers femenins. Dotze actrius espanyoles, encapçalades per Mariana Vaca i Mariana de la O, el mes de març del 1587 havien enviat a les autoritats un memoràndum per demanar el permís oficial per treballar,  en què, capgirant els motius morals pels quals se’ls negava exercir com a professionals de l’escena, van argumentar que el teatre era un perill per als seus marits que havien d’estar molt de temps fora de casa i que, a més, s’havien de transvestir per interpretar papers de dones i viure en un món molt masculí que els podia portar a d’altres “pecats” majors. No fou, però, fins a l’estiu i a partir de la llicència obtinguda pels italians, que es va aixecar el veto.

Aquesta incorporació de les dones com a actrius professionals a finals del segle XVI va significar també la incorporació de les dones com a empresàries teatrals i van poder obtenir el títol d’autores, és a dir de directores de les companyies i de les representacions. Val a dir que, en aquests primers temps, bona part d’aquestes dones que entraven a l’ofici estaven vinculades al món del teatre a partir de les figures masculines, bé del marit o del pare o tutor.

És també en aquesta època, els segles XVI-XVII, quan es comença a tenir notícia de dramaturgues, d’escriptores de teatre. A partir de l’irregular però bàsic llibre de Manuel Serrano Sanz, Apuntes para una Biblioteca de Escritoras españolas des del año 1401 al 1833 (publicat el 1903), van sortir a la llum diverses autores oblidades i alguns, pocs, estudis més actuals han incidit en la recuperació d’aquestes veus. El més important són els diferents volums dirigits per Juan Antonio Hormigón, Autoras en la Historia del Teatro Español (1500-1994). També, a banda de diverses monografies concretes sobre el teatre representat durant aquells segles, cal esmentar el diccionari en línia Biografies de dones catalanes, coordinat des de la Xarxa Vives de les universitats catalanes. Els primers noms els trobem ja al segle XVII i moltes d’aquestes escriptores són també actrius. En molts casos, la documentació és incompleta i cal esperar noves recerques. Esbosso, però, una visió general d’aquestes primeres –poques- dramaturgues catalanes o bé relacionades amb els seus territoris, que, això sí, van escriure les seves obres en castellà.

 

Maria Egual

(Maria Egual)

De fet, de dramaturgues catalanes dels segles XVII i XVIII, tot i els seus textos teatrals en castellà, en podem citar dues: la valenciana Maria Egual i la mallorquina Gertrudis Conrado. Esmento les altres autores per les seves relacions, bé de naixença o residència en els territoris catalans i per les seves contribucions a la pràctica escènica. Una primera dramaturga, nascuda al segle XVII, fou Maria Egual (Ana Maria Josepa Dorotea Egual i Miguel), marquesa de Castellfort. Pascual Mas Usó li ha dedicat diversos estudis i és l’editor de part de la seva obra completa conservada (1997) i Maritza Elisa Mark n’ha fet una tesi (Universitat de Calgary, 1999). Maria Egual va néixer a Castelló el 1655 i es va casar amb Crisóstomo Peris (marqués de Xínquer, primer, i marqués de Castellfort, posteriorment). Instal·lats a València, va mantenir una Acadèmia a casa seva i va escriure poesia, teatre i narrativa.  La poesia de Maria Egual és de caire paradramàtic, en forma de Col·loquis, i les seves comèdies de caire mitològic. Fou autora d’una lloa dramàtica i dues comèdies estrenades al seu palau: Loa para la comèdia “También se ama en el abismo” (d’Agustín de Salazar y Torres), Los prodigios de Tesalia i Triunfos de amor en el aire. Va morir a València el 1735.

Molt poques dades hi ha sobre Gertrudis Conrado, de qui se sap que va néixer a Palma, filla d’una família de la noblesa benestant, que es va casar amb Bartomeu Danús i que va morir el 1832. Dedicada a l’estudi de les Belles Arts, Gertrudis Conrado va publicar poemes i va escriure teatre. Es va representar, i amb èxit, almenys una obra seva a la Casa de les Comèdies de Palma el 1786: la comèdia en tres actes i en vers Por guardar fidelidad insultar a la inocencia, y esclava por el honor.

Pel que fa altres dones de teatre relacionades amb els nostres territoris, hem de comentar també les trajectòries de l’actriu i dramaturga Mariana Alcázar, de l’actriu i empresària María de Navas i de la traductora de teatre Margarita Hickey. Mariana Alcázar, nascuda a València el 1734, es va traslladar a Madrid on esdevindria una de les més famoses actrius del segle XVII. Casada amb un actor, José García Ugalde, van treballar per diverses companyies fins que van crear la seva pròpia, la qual rivalitzava amb la de María Ladvenant. Els partidaris d’Alcázar (“los chorizos”) van protagonitzar diversos enfrontaments amb els de Ladvenant (“los polacos”).  Fou autora del sainet, d’un acte i en vers, La visita del hospital del mundo, que fou estrenat per la companyia de María Hidalgo el 1783 -o 1784-, del qual se’n conserva una còpia manuscrita del segle XIX a l’Institut del Teatre de Barcelona. Mariana Álcazar va deixar els escenaris el 1787 i va morir a Madrid el 1797.

María de Navas és protagonista d’una biografia apassionant i digna de ser portada a escena. Va néixer el 1666 a Milà, filla de músic, i als dotze anys va passar a viure a Barcelona i, posteriorment a València. Es va iniciar com a actriu en companyies madrilenyes i valencianes. Es va casar molt jove amb un altre actor, que havia estat frare, però el matrimoni es va anul·lar per no haver estat consumat. Es va tornar a casar amb l’actor Francisco Moreno i, posteriorment, amb l’apuntador Buenaventura Castro, però el 1700 ja constava com a separada i dona independent.  Va intentar fer-se monja diverses vegades i va protagonitzar tot un seguit d’escàndols de caire moral i pel seu comportament pecaminós, un dels quals li va comportar el desterrament a Lisboa. No va deixar d’actuar, especialitzada en papers de “dona varonil” i de dona vestida d’home típica del teatre barroc. Va morir, encara en actiu, el 1721, a Madrid. María de Navas fou, en el sentit exposat anteriorment, autora de teatre, és a dir empresària.  Aquesta vida intensa, plena d’incidents, es reflexa en uns escrits que li són atribuïts però que, pel to misogin i pels atacs com a dona i com a actriu que contenen, semblen falsos. A l’Institut del Teatre de Barcelona, es conserven tres d’aquests textos, datats a Lisboa el 1695, de caire autobiogràfic i de defensa de les seves actuacions, tot i que hi ha dubtes, com hem dit, que en fos l’autora. La primera obreta és una autobiografia en forma de novel·la picaresca i eròtica: Manifiesto de María de Navas, la Comedianta, en que declara los justos motivos y causas urgentes que tuvo para hacer fuga de la Villa de Madrid, Corte de Castilla, a la ciudad de Lisboa, Corte de Portugal. La segona és una resposta de defensa:  Copia de una carta que ha escrito María de Navas, la Comedianta, en respuesta a otra que recibió en Lisboa, acompañada de un Papelejo intitulado: Defensionario general, que (suponiendo le escribió de su orden) ha publicado Don Fulano de Tal, un ingenio que dice vive en la Corte, y es nacido y criado en las Batuecas. I la tercera, encara amb un títol més llarg, és un libel en contra de les dones i en contra del teatre: Apología por el Manifiesto y carta de María de Navas, la Comedianta. Preséntase en la palestra el Juicio Recto, llamado del Hirónica Defensa que sacó a la luz del candil un Zoylo insensato, y sin irle ni venirle se metió en guindillas, auxiliado de su Mecenas el Licenciado Busca Ruidos, por quien los halla, y a quien las dedica. Corrección del Caballero del Verde Gabán al seugndo Don Quijote. Consulta de Crisis al ingenioso Consejo de la Tertulia, sobre que se ponga perpetuo silencio al Versificante de la Mancha. Escríbela María de Navas, dictada del Sindéresis. Dedícala al Caballero del Phebo.

I, finalment, podem fer esment de Margarita Hickey Pellizoni, nascuda al voltant de 1740 a Barcelona, filla d’un militar provinent de Dublin i d’una mare italiana de família de cantants. Molt aviat es va traslladar a Madrid, on es va casar amb Juan Antonio de Aguirre i va alternar en els cercles il·lustrats. Instruïda i culta, fou poeta i traductora de teatre. Va tenir diversos problemes amb la censura per publicar les seves traduccions –ho va intentar fins i tot amb el pseudònim d’Antonia Hernanda de la Oliva, però no ho va aconseguir, i només en va poder editar un volum, fins al 1789. En els darrers anys de la seva vida es va dedicar a l’estudi de la Geografia i va morir després del 1791.  És autora de les traduccions del francès al castellà d’Andròmaca, de Racine (al voltant de 1759), i de Zaira (1787) i Alcira de Voltaire.

De les faixes de castedat als burquinis

ancientbelt2

 

No m’agrada el burca, ans al contrari. Però el problema no són el vel o el burca, sinó la llibertat de les dones, començant per la llibertat dels seus cossos. La polèmica del burquini és, com passa sempre, només la punta de l’iceberg, l’anècdota. Ens escarrassem en debats superficials i deixem de banda l’arrel, el control dels cossos femenins i de la seva sexualitat.

Des de sempre, històricament, les dones han estat objectes del desig, però no han estat subjectes ni han estat considerats els seus desigs. La dona sexual, digues-li Medusa o digues-li Salomé o Eva, sempre s’ha associat al mal, al pecat. La vagina dentata és segurament el mite que millor representa la por dels homes a la sexualitat femenina. Jean Markale (Mélusine ou l’Androgyne, 1983) va interpretar les teories de Freud en un sentit contrari: en tenir les dones tant un òrgan receptor, la vagina, com un equivalent al penis masculí, el clítoris, considera que aquest imaginari no respon a la freudiana “enveja de penis”, sinó a l’enveja i temor dels homes de la sexualitat femenina. Si bé l’imaginari popular ha anat reproduint el mite de la vagina dentata, fins al 1668 no hi havia cap terme per designar la vagina, sinó que es descrivia segons la definició feta per Eròfil (III a.n.e.): “penis introflexe”.

I és que els genitals femenins –els pits sempre han anat associats al paper maternal positiu- interessaven poc científicament i eren tractats sempre en relació als masculins. Ja Aristòtil definia la dona com un home inferior, amb genitals poc evolucionats que creixien cap endins i no cap enfora. El bisbe Nemesi (segle IV) sostenia que homes i dones tenien els mateixos òrgans sexuals, però que les dones els tenien dins del cos, i Isidor de Sevilla anomenava els genitals femenins amb el terme de sinus pudoris (la cova de la vergonya). El cos femení, en la concepció clàssica, era percebut com una desviació de la naturalesa del cos masculí.  Al segle XVI, un professor d’anatomia de la Universitat de Pàdua, Renaldo Colombo (De re anatomica, 1559), fent honor al seu nom, va “descobrir” per a la ciència el clítoris, i el va anomenar “l’amor o la dolçor de Venus”. Però el clítoris va esdevenir una amenaça de respectabilitat en la societat burgesa del segle XIX, que censurava el plaer femení, i fins i tot curava la depressió amb la pràctica de la cliterectomia. El que no es podia dominar, s’havia de demonitzar.

Un metge francès, Joseph Claude Récamier, va inventar l’espèculum, un instrument que permetia observar i visualitzar l’aparell reproductor femení sense obrir el cos. Curiosament, el controvertit –per les seves pràctiques amb esclaves- ginecòleg americà, Marion Sims, en utilitzar-lo, va descriure l’experiència com si fos un heroi colonitzador i conquistador: “Ho vaig veure tot com cap home ho havia vist abans. (…) Em vaig sentir com un explorador de la medecina que veu per primera vegada un territori nou i important.” (La història de la meva vida, 1884).

El control de la sexualitat femenina és ple d’exemples, el més famós, potser, és el del cinturó de castedat. O la més desconeguda “faixa femenina”. Al segle XIX, per evitar que les nenes es masturbessin, un metge d’Edimburg, John Moodie, va idear la “faixa femenina de castedat”. Feta amb materials tous, s’hi posava una reixa a la part de la vulva. Les barres de la reixa eren de marfil o d’os i es tancava amb un cadenat. Moodie creia que, a més de ser efectiva en contra la masturbació, tenia també una “importància suprema i essencial” com a mitjà per evitar la seducció.

De les faixes, cotilles o mantellines d’abans als burquinis d’avui. El problema no són les peces de tela, sinó el control moral, religiós i social -per tant, polític. En definitiva, la manca de llibertat de les dones per disposar dels seus propis cossos.

Vacances

 

Jove_decadent._Obra_Ramon_Casas
“Jove decadent”, Ramon Casas (1899)

 

Poema de Maria Mercè Marçal (Cau de llunes, 1973-1976):

 

CORRANDES DE LLUNA

Avui, si venia
la lluna morta,
l’amor cantaria
que truca a la porta.

I si ens arribava
amb gep a Ponent,
l’amor cantaria
en quart creixent.

Si la lluna era
rodona i roja,
l’amor cantaria,
l’amor boja.

Mes ai, si ve blanca
rodona i blanca,
l’amor cantaria
que la porta tanca.

I si duu la lluna
un gep a Llevant,
l’amor cantaria
l’amor minvant.

Tretze noms, entre tantes

Les anomenades “Tretze Roses” van morir afusellades el 5 d’agost de 1939. Tretze dones joves (la més gran tenia 29 anys) assassinades pel règim franquista per ser militants de l’organització comunista JSU (Joventuts Socialistes Unificades). Tretze noms entre tants i tants d’altres, entre tants homes i dones víctimes de la dictadura feixista.

oblates.smallVoldria breument, en record i honor de tantes roses escapçades per la violència del règim de Franco, fer esment en concret i també de la violència sexual que van patir les dones del bàndol republicà. A la Maternitat d’Elna, les dones acollides eren violades pels guardes. Com ho eren les dones republicanes a les presons franquistes. Són diversos els estudis –i, també, les exposicions- sobre les presons de Franco. Esmento, perquè m’és ben proper, l’estudi de Josep Subirats (2006) sobre la presó de dones al convent de les Oblates de Tarragona.

En moltes de les presons, arreu de l’estat, les funcionàries eren monges i dones de la Sección Femenina. Les condicions eren infrahumanes, amb espais bruts i infectats en què s’amuntegaven 60 dones on hi cabien només 10. Tenien una llauna d’aigua per beure cada tres dies, i una alimentació mínima, habitualment només de brous aigualits de verdures. Quatre cubells d’aigua servien per a la neteja de seixanta dones, a les quals, a més, les ruixaven amb sofre per combatre la sarna. S’executaven pallisses en grups i per torns; les feien servir per a experiments mèdics; es realitzaven violacions diàries individuals i en grup; també violacions davant dels marits abans de matar-les; se’ls imposaven humiliacions com les d’haver de fer les seves necessitats en públic… A més dels cops, els insults, les vexacions… Fins i tot, les humiliacions de portar-les a missa, de batejar-les o obligar-les a combregar. Una dels casos més famosos fou el de la republicana i activista Matilde Landa, empresonada a Palma i que les autoritats del nou règim volien convertir al catolicisme com a acte propagandístic. El setembre de 1942, va “caure” –es parla també de suïcidi- des d’una finestra i la llegenda diu que fou batejada abans de morir. El grup Barricada li va dedicar una cançó que porta el seu nom (2009), la tornada de la qual fa referència a aquest episodi:

 

Tatuada con aspereza de balas y cárcel,
Sentida por todas como parte importante
De anhelos cercanos, de libertad y coraje,
Has llegado más lejos que el viento
Que fugitivo te llevó con él, te llevó con él…

Matilde Landa, republicana,
No pudieron colgar de tu pecho ni crucifijos ni sotanas
Matilde Landa, republicana,
No pudieron colgar de tu pecho señales amargas
Que irónica es la vida,
Que por un lado seas consuelo para muchas
Y a la vez la soledad te acompaña en cada lágrima
Cuando inventas conversaciones con tu pequeña niña
Que en casa continúa esperando a que regreses… a que regreses

Matilde Landa, republicana,
No pudieron colgar de tu pecho ni crucifijos ni sotanas
Matilde Landa, republicana,
No pudieron colgar de tu pecho señales amargas
Matilde Landa, republicana,
Nos espera en el aire tu abrazo, eres lluvia enterrada
Matilde Landa, republicana,
Y las celdas sintieron el vértigo de tu salto mortal

 

I un darrer apunt: rapar les preses. Els cabells de les dones com a mite i, alhora, tabú. Els cabells tapats amb mocadors o vels, en senyal de submissió. En el binarisme dona-àngel-Maria i dona-harpia-Eva, els cabells temptem al pecat. Erika Bornay va publicar fa anys un assaig sobre La cabellera femenina (1994) i les seves representacions de l’erotisme lligades a Lilith i els cabells llargs com a xarxes que empresonen els homes, també com els de la Medusa. No és estrany, doncs, i amb l’excusa de mesures higièniques, que un dels fets més repetits a les presons fos el de rapar el cap.

 

 

Maria Aurèlia Capmany, intel·lectual, compromesa i transgressora

(Avui, 3 d’agost de 2016, la Maria Aurèlia Capmany faria 98 anys!  Reprodueixo un article publicat a Serrra d’Or)

 

Mac

 

Maria Aurèlia Capmany sempre explicava el seu «fra­càs escolar» fins que, a catorze anys, va entrar a l’Insti­tut-Escola de la Generalitat Republicana. A diferència de l’educació de caire memorialístic i normatiu rebuda fins aleshores, a partir del febrer de 1932, al nou centre, va aprendre «a pensar, a ordenar els coneixements, a dir la veritat i a sentir-se responsable de cadascun dels seus actes». Per això no és gens estrany que, en la seva elecció d’estudis universitaris, es decantés per la Filo­sofia. Li agradava la literatura i fins i tot un conte seu, «Vida i miracles d’un pèsol caputxí», havia guanyat el 1935 un premi en un certamen de l’Institut-Escola. S’hi havia presentat a instàncies del seu professor, Ramon Esquerra, el qual es va enfadar quan Maria Aurèlia Capmany li confessà que, en lloc de Literatura, triava la carrera de Filosofia, perquè «el pensament és com una sola cosa, com una sola història, amb un sol argument, un sol punt d’arribada».

Aquests anys juvenils d’esperances joioses de futur es van veure totalment interromputs i anorreats per la guerra de 1936 a 1939 i, sobretot, per la victòria del bàndol feixista i per les polítiques del règim dictato­rial franquista. Maria Aurèlia Capmany, en el dietari que escrivia durant aquesta època, s’imaginava, tot i ser conscient dels entrebancs que tenia com a dona, èxits professionals i creatius, però les noves lleis i im­posicions ja li van deixar clar ben aviat, tal com deia Pilar Primo de Rivera, al capdavant de la Sección Femenina, que havien passat els temps de «la moderní­sima joven del Instituto Escuela» i que la «mujer nueva» de la «nueva España» havia de tenir com a únics i valuosos objectius vitals els del matrimoni i la ma­ternitat. Tot i això, Maria Aurèlia Campany, havent patit diverses crisis personals i identitàries per voler adaptar-se a les noves normes, torna a la universi­tat per continuar els estudis, renuncia al matrimoni i opta per la carrera professional. Una excepció en aquella postguerra fosca. I, també, una transgressió.

Ja llicenciada, mentre treballava com a ajudant de la càtedra de psicologia del doctor Font i Puig, Maria Aurèlia Capmany va fer una altra tria: va abandonar la tesi doctoral en curs i la vida universitària per de­dicar-se a la docència en l’ensenyament secundari. La seva tesi versava sobre Plotí, en concret sobre el conei­xement del llenguatge poètic per damunt de la racio­nalitat, basant-se en la sisena Enèada d’aquest autor, un filòsof format en una escola de tendència eclèctica a Alexandria i que va crear la seva a Roma, on, a més de impartir lliçons, era conseller i tutor dels alumnes joves. Maria Aurèlia Capmany va deixar de banda l’es­tudi dels temes ontològics de Plotí i es dedicà, fins a 1965, a la docència. Fou una professora també diferent i transgressora, i l’afany pedagògic és present en bona part de la seva obra, amb la necessitat d’explicar i ex­plicar-se a les noves generacions. Fou en aquesta època de docent que Maria Aurèlia Capmany va començar a escriure, iniciant en ferm la carrera literària, amb unes primeres obres no exemptes de traves, sobretot a causa de la censura. Les seves primeres novel·les, amb in­fluències existencialistes, a partir de Necessitem morir, finalista del premi Joanot Martorell el 1948 i que no va poder ser editada fins a 1952, se centren bàsicament en la recerca de la identitat, personal però també de la del país. Des d’aquests inicis, l’autora sempre va anar repetint que la cosa més important per a ella era la novel·la, la creació narrativa. Però el context, a final dels anys cinquanta, la va convertir també en una dona de teatre, primer a l’Agrupació Dramàtica de Barcelona i, de 1960 a 1965, al capdavant de l’Escola d’Art Dra­màtic Adrià Gual.

Personatge públic

Aquests anys, de plenitud creativa i professional, són fonamentals en la construcció del personatge públic. Són els anys de sortida al món, de «resurrecció», com deia l’escriptora, en contacte amb les noves generaci­ons, sobre les quals exercirà un mestratge important. Maria Aurèlia Capmany opta, aleshores, per la pro­fessionalització literària, polifacètica i diversificada: narrativa, teatre (autora, dramaturga, directora, actriu), assaig, guions (ràdio, televisió, cinema, còmic), traduccions, articles, conferències… I també opta per la llibertat, per la llibertat pròpia i per la lluita per les llibertats civils i polítiques. Durant la dècada dels anys seixanta, en paral·lel als moviments internacionals de defensa dels drets civils i, també, en el context nacional de la resistència política i cultural al franquisme, Maria Aurèlia Capmany comença a defensar públicament la seva oposició al règim des de posicions socialistes i el seu feminisme, i ho fa a partir de l’elaboració d’un discurs propi per mitjà de diversos llibres d’assaig. A partir de l’eix de la Història, dos temes predominen en la seva producció assagística: el de la memòria i el del feminisme. La història del seu país i la seva pròpia, amb volums de caire més aviat documental (Pedra de toc i Pedra de toc II), es combinen amb d’altres de literatura autobiogràfica (Mala memòria i Això era i no era) i dietaris o reculls d’articles (Dia sí, dia no, Cada cosa en el seu temps i lectura cada dia, Coses i noses, Dietari de prudències). I, per una altra banda, des de la recerca de documentació i del treball de camp per a escriure La dona a Catalunya, que fou el seu «camí de Damasc» per a esdevenir una defensora del feminisme, la història també li serveix per a situar i estudiar la condició de les dones i, sobretot, per a ser una de les pioneres a casa nostra en la introducció i l’elaboració de teories feministes, desenvolupades en nombrosos assaigs.

La construcció d’identitats i de la pròpia identitat, emmarcades en el context històric, forneix arguments a les seves novel·les i, al mateix temps, és també el motor de pensament dels seus assaigs, articles i conferències. En els volums memorialístics, ja des del primer Pedra de toc publicat el 1970, Capmany mostra la voluntat d’inserir dins la Història el seu «nosaltres», tant generacional, com de gènere i nacional, en les diferents línies entrecreuades de «nosaltres els vençuts», «nosaltres les dones» i «nosaltres catalans i catalanes». Els diferents episodis documentats, reconstruïts o evocats des de la memòria personal es decanten sobretot per incidir en els temes històrics i polítics, espurnejats amb reflexions des de la filosofia, la llengua i la literatura, i per denunciar de forma repetida la dictadura franquista i allò que va comportar a tots els nivells, col·lectius i individuals, nacionals i personals.

El discurs de Maria Aurèlia Capmany, però, i essencialment pel que fa a les teories sobre la condició i la història de les dones i el feminisme, no era fàcil de digerir, perquè era també transgressor. I encara més si ho deia una dona amb ironia i de forma descarada. I una dona que no complia gairebé cap de les condicions del model imposat per la «mística de la feminitat franquista» i que tractava els seus companys de tu a tu, mirant-los als ulls, tal com explicaven, per exemple, Joan Perucho o Jordi Sarsanedas. Heterodoxa i fugint d’adscripcions, Maria Aurèlia Capmany, rebel i impertinent, escriurà, repetidament, tant en assaigs memoralístics com en d’altres sobre feminisme, que el punt de partida de tots els seus mals era el franquisme, perquè li va crear el freudià «complex d’enveja de penis», ja que aquest era necessari «com a targeta de presentació» en un país on «exèrcit i església dictaven les normes». Aquesta lucidesa descarada que resumeix amb impertinència i ironia tot un problema vital, a més del vocabulari emprat, topava amb la misògina intel·lectualitat de l’època, desconcertava els seus mateixos companys. Era una dona que «imposava», segons Pere Calders.

Discurs i militància

Maria Aurèlia Capmany construeix el seu discurs i el seu personatge. Si els seus congèneres creien que la podien desarmar tractant-la amb cert menyspreu de «senyoreta Capmany», ella els responia riallera que sí, que, com diu la frase feta espanyola, era «solterita como mi madre» i es definia com una dona pública, ben conscient que, en aquell moment, el terme «pública» aplicat a les dones només era sinònim de prostituta. Transgressió en les teories i les paraules, transgressió en reivindicar l’accés a l’espai públic i la seva ocupació en tots els seus sentits. I, també, transgressió en l’actitud i el comportament, essent una «dona que fumava» i no s’estava de sortir a les fotografies amb un cigar considerable a la boca. Maria Aurèlia Capmany, defensant en la pràctica les seves teories, «esdevé dona». Com diria Simone de Beauvoir, amb la qual Maria-Aurèlia Capmany compartia moltes tesis, l’escriptora catalana va voler esdevenir i ser considerada transcendència, tot refusant la immanència a què es trobaven reduïdes les dones sempre tractades com a alteritat i sense poder ser subjectes històrics i polítics. Va esdevenir una «dona emancipada».

Maria Aurèlia Capmany fou una de les principals introductores d’un feminisme modern «multigenèric», ja que se servia d’arguments provinents de la biologia, la psicologia, el materialisme històric i la crítica literària; la qual cosa també li va permetre de trencar els límits i les fronteres de la Literatura per fer-ne un concepte més dialògic i híbrid, en una línia en què insistiran altres feminismes posteriors. Alguns dels seus postulats han estat discutits o rebatuts per escoles crítiques actuals —la concepció estàtica del patriarcat, la feminitat com a construcció, la incompatibilitat entre maternitat i vida pública, l’absència dels termes d’erotisme i desig…—, però, en canvi, d’altres encara resten pendents —el conflicte entre producció i reproducció, les construccions androcèntriques dels mites i l’imaginari cultural…

La seva militància teòrica i pràctica com a feminista s’arrenglera dins de l’anomenat feminisme de la igualtat i en la defensa d’una lluita conjunta d’homes i dones per tal d’aconseguir la justícia social. I és en aquest punt de lluita conjunta on coincideixen el seu feminisme i el seu nacionalisme. Feminisme i nacionalisme, per a Capmany i basant-se en el materialisme històric, sorgeixen d’un estat d’opressió. De la mateixa manera que Maria Aurèlia Capmany posa en evidència que les dones mai no havien estat subjectes històrics i blasma l’ordre patriarcal, des del seu nacionalisme d’esquerres i amb una crítica constant al paper de la burgesia catalana també denuncia que «els Països Catalans són una nació colonitzada des del Decret de Nova Planta». Per tant, segons l’autora, és «raó de justícia» lluitar per la igualtat de drets de les dones i per reclamar els elements identitaris nacionals, com la llengua. D’aquí ve l’allunyament, a partir de les primeres Jornades de les dones catalanes celebrades el 1976, per la seva defensa d’una lluita social, política i nacional conjunta, d’alguns sectors dels feminismes de la transició. Maria Aurèlia Capmany sostenia que hi havia una contradicció en les tesis d’algunes d’aquestes feministes totalment oposades a fer front comú amb els homes tot refusant els valors patriarcals, perquè, segons ella, creien que «defensar el dret a la integritat nacional dels Països Catalans és fer el joc al mascle», però que, al mateix temps, parlaven «en llengua espanyola, que representa una altra nació que per a elles hauria de ser tan privativa del mascle com la nostra».

La seva trajectòria vital de dona pública, professional de la literatura, es va moure sempre per l’afany de conèixer i saber. Ho féu des de posicions heterodoxes, servint-se de la impertinència i en constant transgressió dels models marcats. I amb un ferm compromís en contra de desigualtats nacionals, socials, racials o de gènere. No ens ha de fer estrany, doncs, que ara, vint anys després de la seva mort, encara sigui un personatge
incòmode.

 

Dones i qüestió nacional

foto 2
“La mare pàtria”, W.A. Bouguereau, 1883

Els relats nacionals, construïts amb discursos i símbols, difereixen segons la posició política que ocupen les nacions, com és el cas que s’analitza en aquest article, la qüestió nacional catalana, una nació sense estat, que té uns marcs estructurals i polítics que són els d’uns Estats nació, sobretot els d’Espanya. Els relats nacionals, també, difereixen segons els gèneres, ja que, en haver estat elaborats des de les polítiques d’identitat patriarcals, la feminitat, en aquests contexts, ha estat per tant construïda en relació als homes i la nació. Les dones no han estat reconegudes en els discursos sobre la nació ni en la seva dinàmica, d’aquí la sinergia entre reivindicacions nacionals i feministes. Les dones reprodueixen simbòlicament les nacions, i aquest és el cas català. La figura de la Ben plantada noucentista simbolitza la dona mare dins la casa que acaba sent la dona/pàtria dins la nació. Un relat identitari que estableix unes relacions de gènere concretes, de subordinació i colonització de les dones. Ara bé, al mateix temps, el relat de l’estat nació Espanya feminitza la nació sense estat catalana, també establint unes relacions de subordinació i colonització. Així, doncs, la Ben plantada nació catalana és, alhora, doblement colonitzada, com a dona i com nació.

Resum de l’article : Montserrat Palau: “La ben plantada colonitzada: dones i qüestió nacional catalana”

Article sencer: aquí